22 de septiembre, 2021
Según la Organización Mundial de la Salud, la fibromialgia es un tipo de reumatismo no articular, ya que afecta ligamentos, tendones, músculos y no a las articulaciones. Hasta el día de hoy no se sabe que la origina, por lo que el tratamiento se centra en controlar los síntomas.
Tratamientos para la fibromialgia
Mediante la ozonoterapia, el cupping y la osteopatía, vamos a enfocarnos en los 2 grandes síntomas de la fibromialgia, es decir, el dolor que afecta a ambos lados del cuerpo y la fatiga, la cual puede ser incluso más molesto que el mismo dolor, ya que puede aparecer en tareas sencillas que antes se hacían sin ningún problema y ahora requieren un mayor esfuerzo.
1.- Ozonoterapia:
Es la inyección de ozono (O3) en los puntos dolorosos. Cuando el ozono entra en contacto con la zona de dolor se produce un efecto desinflamatorio y de relajación muscular, quitando la presión en dicha zona, disminuyendo así el dolor.
Para combatir la fatiga lo que se busca es la oxigenación de todos los tejidos del organismo mediante la inyección de ozono vía intravenosa para que a través de la sangre sea distribuido a todo el cuerpo.
2.- Cupping (ventosas):
Por medio del tratamiento con ventosas, se busca relajar la fascia (capa que envuelve al músculo). En los pacientes con fibromialgia, hay mucha tensión de la fascia.
3.- Osteopatía:
En el caso de las manipulaciones, se ha visto que son muy eficaces para provocar cambios significativos en la tensión de los músculos de la espalda y la zona del cuello, relajando y disminuyendo el dolor.
La combinación de estos tratamientos permitirá que el paciente tenga una mejor calidad de vida, ya que podrá hacer sus actividades cotidianas, tener un sueño más reparador y mejorar por lo tanto su estado de ánimo.